Casio sabe que sus calculadoras tienen la batalla perdida en Occidente. Así que ha diseñado un plan B: África
En un mundo dominado por los smartphones, donde cualquier móvil tiene una aplicación de calculadora, podría parecer que los días de las calculadoras de bolsillo están contados. Sin embargo, Casio, el gigante japonés que lleva casi 60 años en el negocio, tiene un plan para mantenerse como una compañía relevante: llevar sus calculadoras científicas a las aulas de países en desarrollo.
En busca de los países ideales para seguir expandiéndose. Desde que se lanzara su primera calculadora científi…